Sencillamente no podía creérselo. Estaba allí, buscando a la única persona que sabe que estaba relacionada con Ethan de alguna manera. Si, el mismo Ethan al que ella vio de nuevo y que no recordaba nada de su época como brujo del aquelarre Géminis. Lo cierto era, que un Valerie trato de ayudarle, no llego a tiempo de conseguirlo.

Ni siquiera sabe si murió recordando su verdadera vida o no. Le ha costado asimilarlo, aun cuando no había una conexión real entre ambos. Sin embargo, Valerie nunca terminó de comprender porque el aquelarre Géminis seguía odiando tanto a los brujos sifón. Menos aun cuando sus descendientes vivos… al parecer no compartían ese parecer.

Todo eso los había llevado a perecer como comunidad de brujos asique… sencillamente solamente quedaba alguien a quien avisar de lo que había ocurrido con Ethan: Liv Parker.

Lleva un mes buscándola, pero al final, parece que ha conseguido dar con ella. Solamente espera que pueda escucharla, al fin y al cabo, cree tener la certeza de saber que busca la rubia—. Olivia —la llama por su nombre completo—. Imagino que… buscas a Ethan —añade al final para prevenir un posible ataque. Mencionándole, ¿escuchara lo que tiene que decirle?

De nuevo otro día más pasaba sin saber de Ethan, no entendía nada, ¿dónde podía estar? Siempre que se marchaba se lo decía, había sido así por mucho tiempo y nunca desaparecía sin más, el no tener señales del hereje comenzaba a asentar un sentimiento de que algo iba realmente mal pero una parte de Liv se negaba a aceptarlo.

La negación era una forma de afrontar la situación para alguien como ella quien había perdido tanto y a tantos por el camino que no era capaz ni si quiera de permitirse pensar que Ethan podría haber sufrido un terrible desenlace pero cuando la voz de aquella mujer la tomó por sorpresa llamándola por su nombre completo así como mencionando al Lenoir supo que algo iba mal costándole unos segundos reponerse.

-¿Cómo sabes mi nombre completo?-fue lo primero que cuestionó algo cauta ante aquello en particular, no creía que el hereje se lo hubiese revelado cuando sabía que prefería que la llamasen Liv-Le estoy buscando, sí, ¿sabes algo de él? ¿Le has... le has hecho algo? ¿Quién eres?-cuestionó aun con cierta cautela, desde que escapaba de su hermano Kai había de tenerla pero tenía tantas preguntas y tan pocas respuestas que estaba decidida a arriesgarse.

— Tiempo atrás fui… parte de los Géminis —responde intentando demostrar que no es su enemiga—. Estuve con… tu hermano Kai encerrada en el mundo prisión —Por eso conoce su historia, por eso la conoce a ella.

Kai nunca fue alguien de su agrado, en el mundo prisión también los uso y traicionó y eso es algo que Valerie todavía no ha olvidado. Sin embargo, no ha tenido oportunidad de cruzarse con él. Pero si con Ethan. Y se sorprendió mucho al ver como las cosas parecían haber cambiado.

— Se qué... no tienes motivos para creerme, pero no soy tu enemiga... —Quizas antaño podrían haberlo sido por diferencias dentro del aquelarre, pero… a aquellas alturas, ¿los Géminis seguían existiendo como tal? Valerie sabe que no. Después de todo lo que paso cuando salieron del mundo prisión no—. Se donde esta Ethan… pero lo que tengo que contarte seguramente, no te guste —Y teme que al creerla una mentirosa decida tomarse una justicia errada y atacarla.

La bruja vivió esa historia desde la distancia sabedora de lo que sucedió, que aquellos fueron repudiados por el aquelarre en su momento y que terminaron en el mismo lugar junto a Kai en algún punto, todos escaparon propiciando el fin de su aquelarre, el trágico final de su mellizo, Luke-Ese psicópata no es mi hermano, el único hermano que tuve está junto a la mitad de mi corazón a tres metros bajo tierra-porque para Liv él era su mundo y una parte de ella murió junto a este.

-Tú estabas con ellos, con los herejes, los que acabaron con él, con mi aquelarre-recordó con rabia así como tristeza entremezcladas en su voz-¿Cómo voy a creer en lo que dices tras lo que pasó? Si viniste a acabar el trabajo que los otros hicieron en su momento entonces hazlo sin más, ya no me queda nada-lo único que le quedaba era rencor, impotencia y soledad.

Pero no podía evitar pensar en que si quisiese acabar con ella podría haberlo hecho ya sin si quiera entablar conversación, ¿quizá fuese algún tipo de truco? El propio Kai tenía tendencia a crear escenas de ese tipo cuando la encontraba, le gustaba recrearse en lo que le arrebató y el poder que tenía sobre ella pero el nombre de Ethan la hizo reaccionar-¿Dónde está?-urgencia en su voz-Déjate de rodeos y dime lo que sepas, lo he buscado por toda la ciudad sin éxito, mis hechizos de localización no sirven-explicó apurada-¿Qué sabes?-demandó apretando los dientes, no podía evitar ponerse en lo peor.

Valerie suspira. Por algún motivo más que obvio sabe que aquel apodia ser una reacción. De hecho, es la reacción que esperaba. En el fondo no era algo sencillo porque en aquel momento, lo que expresa Liv no es del todo mentira. Mas bien todo lo contrario.

— Los herejes, dejaron de ser mi familia. Igual que Kai en algún momento lo fue y dejo de serlo. —Aun le duele pronunciarlo. Porque aún eso sigue clavado en su pecho. El precio que pago por su verdad fue demasiado elevado y por ende, las consecuencias… aun carga con ellas—. Tiempo después me quede sola. No espero que te compadezcas de mí, no te confundas. Pero conocí a Ethan entonces —declara finalmente.

Quizas, eso rebajaba un poco los ánimos. Al fin y al cabo, no había mentido. Ya no podía considerarla su enemigo, a no ser que al contrario fuese así—. Me marché de Mystic Fall y al regresar volví a encontrarle… pero había cambiado. Se había… convertido. En lo mismo que yo. —Valerie se pregunta si esa información es algo que Olivia sabe. Porque es complicado explicar lo que ha visto si no es así—. Ademas, habia perdido la memoria. —Hace una pausa, esperando saber si la contraria era consciente de todos estos hechos.

-Jamás entenderé cómo pudisteis juntaros con alguien así-aquel que se hacía llamar su hermano, un hereje ahora, la había atormentado en incontables ocasiones e incluso intentado matar cuando era aun pequeña por lo que no tenía nada bueno para decir de él-¿Cómo os conocisteis? Me refiero a Ethan y a ti-puede que no confiase en ella pero aun se aferraba al recuerdo del que se convirtió en una de las personas más importantes en su vida.

Soltó un suspiro algo nervioso debido a las lágrimas que empañaban sus ojos-Hace tiempo me enseñó parte de sus recuerdos-una época de las más oscuras que Liv hubo de vivir en toda su vida, una época en la que no tenía ningún tipo de motivo para continuar y fue precisamente Ethan quien le dio uno, podría decirse que ambos fueron la tabla de salvación que el otro necesitaba pero dicha tabla había desaparecido para ella dejándola perdida en el mar.

-¿Él perdió la memoria...?-ese hecho sí que lo ignoraba, en aquella época no estaban precisamente muy unidos por lo que había cosas que desconocía pero ese no era el punto-No has respondido a mi pregunta, ¿dónde está Ethan Lenoir?-había casi una amenaza velada en su voz, comenzaba a cansarse de sus juegos y necesitaba respuestas.

El problema precisamente de un encuentro como aquel es que, sin sentir confianza a la una en la otra, ¿Qué justificaba las palabras de Valerie? ¿Dónde podría Liv encontrar la separación entre el odio por los herejes y creerla a ella? Valerie no lo sabía, pero… llego a considerar a Ethan un amigo y el… La mujer sabe lo que Olivia representaba para Ethan.

— Nos conocimos cuando ambos lo perdimos todo… —responde pesadamente—. Cuando los Géminis fuisteis… atacados por mi familia, hubo muchas bajas. —Y entre ellas, hubo personas muy queridas para la propia Olivia—. Se que esto solamente genera rabia en ti, pero necesitas saberlo. Cuando Ethan murió en aquella ocasión, no lo hizo realmente… el también acabó convertido en un hereje. —Porque si, murió con sangre de vampiro en sus venas habiendo sido un sifón. Igual que Valerie.

Y entonces hubo momentos de odio y arrepentimiento mutuo en el cual Valerie llego a ser algo pareció a un amiga. Luego se separaron y cuando ella regreso él había perdido todos sus recuerdos. Y aun son sus recuerdos la aviso a ella cuando supo que estaba en un apuro. Y Valerie, no llego a tiempo.

— Lo siento mucho Olivia, de verdad —responde al cabo de un rato rompiéndose por dentro—. Ethan está muerto. No llegue a tiempo. Te juro que quise ayudarlo… pero fue tarde. Yo misma enterré el cuerpo —declara, dejando que amargas lagrimas caigan por sus mejillas.
Y, sin embargo, tambien está preparada. Preparada por si su tristeza debe ser convertida en rabia. Preocupada por un posible ataque de la contraria.