Es un día terriblemente triste para @Elena M. Gilbert y el resto de sus amigos. El día anterior, la cazadora Gwen L. Ashkore trajo consigo una muy mala noticia, y un cuerpo: @Jeremy G. Gilbert murió tratando de llegar hasta la cura de Silas.

Así pues, al día siguiente, los familiares y amigos de Jeremy se dispusieron a celebrar el funeral. Junto a su hermana, le acompañaron @Bonnie Bennett, @Caroline E. Forbes, @Matthew G. Donovan, @Alaric J. Saltzman, así como Jenna, su tía, y por supuesto, @Damon Salvatore. Por su parte, también acudió @Annabelle R. Zhu, la novia del fallecido.

Parece que el grupo de Elena y sus amigos no consiguen librarse de desgracias, y la ausencia de @Stefan Salvatore, aún recluido junto al híbrido original, no hace sino recordarles que todo aquello no ha terminado. Sin embargo, parece que van a tener compañía en este evento.

Repentinamente, en medio de la celebración —totalmente íntima, y realizada únicamente por y para ellos—, el grupo recibe visita. Se trata nada menos que del mismísimo @Niklaus Mikaelson, quien parece estar más que dispuesto a cobrar represalias ante Elena. La réplica se mantuvo oculta de él, y ahora, es una vampiresa; rompiendo por completo los planes del híbrido original. Junto a él, le acompaña, inesperadamente, Stefan... A quien sus amigos van a ver bastante diferente, muy pronto.

Se masca la tragedia.


• Para evitar que el tema grupal se estanque, no habrá orden de posteo, bastará con esperar a que dos personajes hayan posteado antes de volver a intervenir.

• Jenna intervendrá como personaje narrativo. @Jeremy G. Gilbert puede intervenir aun siendo un fantasma, pues el velo que nos separa del Otro Lado aún no se ha levantado.

• Asimismo, para evitar que el tema se nos haga demasiado tedioso (pues sois un total de 10 participantes, más el PNJ), evitad las respuestas demasiado largas en vuestros post, y sobre todo, dadle prioridad de respuesta frente a otros temas.

La impotencia que sintió Damon en aquel momento le nublaron el juicio hasta el punto de que Stefan había ganado, atacando directamente a Bonnie en lugar de dirigirse a él. La bruja había demostrado el poder de una Bennett y el mayor de los Salvatore había visto en la morena la amenaza que Emily había resultado ser en el pasado. Pero todo ocurrió demasiado rápido.

Quizás fue culpa suya por no evitar de otra manera que Stefan se quedase cerca de el y no pudiese escaparse. Quizás fue porque al igual que siempre Klaus estaba dispuesto a todo y acababa saliéndose con la suya de una forma u otra, o quizás fue la mala suerte que estaban destinado a tener. Fuera como fuese en el momento en el que Klaus desgarro la garganta de Jenna, la tregua que habían marcado para conseguir la cura y dársela a Elena, había finalizado por completo.

Todo se volvió confuso para todos, cuando el cuerpo de la tía de Elena cayo al suelo, sin vida. Alaric, la propia Elena, la desesperación. Una mirada por parte de Damon, una única mirada dirigida hacia Stefan. Recriminando aquel echo aun sabiendo que sin humanidad su hermano no sentiría nada parecido a la compasión o la necesidad de sentirse mal. Pero no puedo evitarlo, no pudo evitar acumular un poco mas en contra de quienes le traicionaban.

Y de un momento a otro, no pudo hacer nada porque ambos cuerpos culpables de aquello prendieron en llamas, quemándose, ardiendo hasta amenazar por convertirse en cenizas. Klaus quizá son moriría, pero su hermano… supo de donde había venido aquello cuando sintió el vórtice de magia que rodeaba a Bonnie, que ahora parecía haberse vuelto alguien a quien tener en cuenta incluso por el hibrido. Y aunque ella les brindaba venganza, tenia que pararla. Porque no quería que Stefan muriese a causa de los engaños de Klaus.

— Bonnie ¡para! —grito el Salvatore avanzando hacia ella, tratando de llegar pese a la magia que le empujaba—. ¡Basta Bonnie! ¡Va a matar a Stefan! —gritó mientras usaba su velocidad para aprovechar un quiebro en su defensa y situarse en el rango de visión de la morena, tomándola por los hombros y encarándola directamente, aun cuando sabia que corría el riesgo de acabar como una antorcha el también—. Stefan no tiene la culpa de esto, para Bonnie, por favor —prácticamente fue una súplica, una que espero que la bruja escuchase.

Caroline escuchó las palabras de Stefan, y mentiría si no reconociera que habían dolido, aunque el planteamiento tuviera todo el sentido en sus retorcidas mentes. Pero no podía culparlo, su querido amigo se encontraba oculto en esas emociones que en esos momentos mantenía ocultas tras un muro impenetrable. Pero no lo miraba a él, sino al híbrido en cuestión, esperando a ver lo que tenía que decirles a todos, y a ella, aunque por el rumbo que estaban tomando no esperaba una solución pacífica para ninguno de ellos.

Cerró los ojos, al final estaba en lo cierto, aunque dudaba que Klaus comprendiera esos conceptos de los que hablaba. — De todos modos a eso has venido, ¿no? A pagarlo con nosotros, utilizando una cara amiga para ello, no vaya a ser que duela menos viniendo de ti — no lo haría, al menos no para ella — pero no nos tomes por idiotas, todos sabemos que los monstruos no conocen el significado de la piedad.


Después de aquello, todo sucedió muy deprisa, por lo que no tardaron en darse cuenta de que todo formaba parte de un plan perfectamente orquestado por el híbrido y el vampiro deshumanizado. No pudo hacer nada cuando Klaus atacó a Anna, demasiado pendiente de lo que pudiera ocurrirle a una desprotegida Jenna y Elena, aturdida por el shock de la pérdida de su hermano y el reencuentro con Stefan, o lo que parecía ser él.
Damon fue por Stefan y Bonnie por Klaus, pero al final de nada sirvió, parecía que el destino de Jenna ya estaba escrito hicieran lo que hicieran y la rubia lo vio reflejado en su rostro segundos antes de que exhalara su último aliento.

Jenna no había sido su tía, pero había sido alguien muy querido para ella, y una de sus personas favoritas en el mundo. Cariñosa, comprensiva, divertida ... Incapaz de hacer el mal a nadie, inocente de todo lo que había transcurrido entre todos ellos.

Y Klaus la había matado para hacerles daño porque le habían herido en el orgullo. Por su maldito orgullo.

Caroline, impotente, se apresuró hacia Elena por instinto, en esos momentos totalmente rota de dolor. Pero su mirada se desviaba por momentos a los dos cuerpos en llamas, cortesía de Bonnie, y se vio incapaz de apartar la mirada de Klaus. Sabía que no podía morir por aquello, y aunque en ese momento pensaba que todo el dolor era poca cosa para él después de lo que acababa de hacer, sintió que el corazón se le hacía añicos.

Todo se había vuelto un completo caos, de un momento a otro, Stefan había agarrado a Klaus y lo había lanzado como si de un bolo se trata contra Bonnie. Alaric se había puesto por en medio para parar el ataque y ambos habían rodado por el suelo. Se alejó con Jenna para evitar que la hiriesen, pero esta estaba demasiado preocupada por el resto y parecía querer hacerse cargo de la situación — No, Jenna. ¿Qué estás haciendo? — se movió hacia la mujer con intención de pararla, pero justo en ese instante, Klaus que parecía recuperado del viaje que le habían metido apareció ante ellas.

Anna no tuvo tiempo de reaccionar antes de que la zarpa de Klaus se clavara en su abdomen. Soltó un chillido de dolor antes de que su cuerpo fuera lanzado violentamente, golpeándose contra un árbol en el camino. El golpe la dejó aturdida durante varios segundos, tiempo suficiente para que Jeremy apareciera a su lado — Estoy bien, la herida sanara — hizo una mueca pues a pesar de que los cortes sanarían, seguían doliendo — Tenemos que salvar a… — antes de que pudiera pronunciar el nombre de la tía de los Gilbert, su vista se dirigió hacia el lugar donde la había dejado, el mismo en el que Klaus la tenía prisionera y donde en esos mismos instantes, acababa de quitarle la vida ante los ojos de todos.

— No… — su voz se transformó en un susurro apenas audible. La mujer a la que le había prometido que todo saldría bien yacía muerta a los pies del híbrido. Su mirada se centró en Jeremy, acaba de contemplar el asesinato de su tía y en esos momentos no sabía ni que decir ni que hacer para consolarlo. Lo único que quería era abrazarlo y ni siquiera eso podía debido a las circunstancias — Lo siento Jer, siento no haber podido hacer nada — se disculpó con la culpa en sus ojos — Tu hermana te necesita — le dijo al ver a una desolada Elena llorar sobre el cuerpo de su tía. Ya no solo había perdido a su hermano, si no que también al único familiar que le quedaba.

Pero la cosa no iba a quedar ahí, Bonnie estaba fuera de control y de un momento a otro, unas llamas empezaron a invadir a ambos intrusos — ¡Stefan! — exclamó preocupada por aquel al que una vez llamó amigo. A pesar de todo, Anna no quería que el menor de los Salvatore muriera.

Ya no hay vuelta atrás: está hecho. De nada valen ya los gritos que suenan lejanos, ni las lágrimas ni las palabras llenas de odio y dolor. A diferencia de lo que muchos pensarían, no hay alegría, ni victoria, en la mirada del híbrido original; solo la más pura y absoluta frialdad. Tampoco hay culpa, después de todo ha hecho lo que era necesario: devolver el golpe, vengarse, reafirmar su reputación una vez más.

Klaus Mikaelson nunca perdonaba, nunca tenía piedad. Y el mundo necesitaba recordarlo.

Lo único que siente es pesar porque sabe que una de los presentes, la única que importa, no va a perdonarle algo así. Y ahora al fin lo ve justo como lo que es: un monstruo.

—Te di una oportunidad, Elena. Esto es lo que pasa cuando tomas la decisión equivocada y confías en la persona equivocada —se dirigió a la destrozada réplica, aunque no era su intención regodearse en su sufrimiento, así que se dirigió a Stefan—. Es hora de marcharse, Stefan —pero, antes de que pudieran hacerlo, las llamas comenzaron a envolverlos en una lenta agonía.

Su primer instinto fue tirarse al suelo, pero las llamas no se extinguían. De hecho, cada vez parecían ser más intensas, demostrando el gran poder que poseía Bonnie; un poder que Klaus solo había visto de cerca una vez en otra bruja, una de su círculo de confianza.
No fue consciente de cuanto tiempo había pasado, aunque se sintió como una eternidad, cuando de pronto el fuego se apagó de golpe. Desde el suelo escuchó voces, gritos, mientras su piel quemada se recomponía poco a poco. Alzó la mirada para descubrir que Stefan se encontraba a escasa distancia de él y, sin pensárselo dos veces y valiéndose de sus últimas fuerzas, usó su velocidad vampírica para levantarse y llevárselo con él, lejos de aquel lugar.

Off: Klaus Mikaelson fuera de escena. Corto y cambio.

Mi estrategia había funcionado mejor de lo que había esperado. Klaus había caído sobre Bonnie y Alaric, que se había lanzado contra ella para protegerla, pero habían acabado aturdidos los dos. Fantástico. Aunque Alaric no me preocupaba, era muy buen cazador y no dudaba de sus habilidades incluso desarmado, pero seguía siendo humano y dudaba mucho que hubiese llevado armas al funeral de Jeremy.

Cuando Klaus aterrizó y me miró de aquella manera mientras me preguntaba si aquello de verdad era necesario simplemente me encogí de hombros con una sonrisa burlona. Era la única idea que se me había ocurrido y, por qué no, había sido muy divertido verlo en modo proyectil.

Después de eso, las cosas sucedieron realmente deprisa. El híbrido original hirió a Anna para hacerse con Jenna y, en un abrir y cerrar de ojos, la humana acabó muerta en el suelo. Fue increíble y extraño, incluso para mí, lo poco que sentía lo que acababa de pasar. No sentía nada al ver a todos aquellos a quienes había querido tanto y por los que habría dado la vida sufrir por la muerte de una persona inocente y querida por ellos.

Lo único que sentí fue el dolor físico cuando Bonnie me prendió fuego sin contemplaciones. Grité mientras caía de rodillas al suelo sintiendo que me ardían hasta las entrañas, peor que cuando había ingerido verbena para librarme del control de Klaus…

Después de lo que aparentemente fue una eternidad, el fuego cesó, pero el dolor no desapareció hasta un rato después en el que me di cuenta de que llevaba un rato retorciéndome en el suelo. No tenía fuerzas para ponerme en pie a pesar de que lo intenté, siempre que me alzaba un poco me acababa cayendo, pero Klaus era más fuerte que yo y poco después me sacó de allí.

Off: parafraseando a Klaus, Stefan fuera de escena. Cambio y corto.

No sabia como, pero Bonnie sentía la desesperación en aquella carne que poco apoco se quemaba con sus llamas. No era consciente de cuanto poder estaba empleando, pero por primera vez en su vida, la cabeza no dolía, la sangre fluía sin salir de su cuerpo. ¿Eso era lo que significaba la magia de Expresión? Si era así, ahora la recibía con los brazos abiertos, poderosa y atrapante, como ya le habían advertido no hacía demasiado tiempo.

Sabia bien que había allí muchas personas que se asustarían de su poder, empezando por sus amigas, que no dejaban de tener aun ciertos sentimientos por aquellos dos hombres que ahora yacían a sus pies, retorciéndose por el dolor que provocaban sus magias. Y se sentía bien con aquel dolor, tanto que estaba fuera de sí. Sin embargo, no fue ninguna de aquellas personas quien trato de detenerla.

Lo izo quien menos se lo esperaba. Damon Salvatore, que siempre había demostrado odiar a su hermano, que siempre había demostrado la necesidad de que Elena le amase, ahora prácticamente le suplicaba por la vida de su hermano desde la distancia—. No te acerques Damon —le advirtió furiosa, pero el pareció ignorarla, y en una brecha de su defensa mágica consiguió colarse y agarrarla por los hombros.

La tentación de causarle un intenso dolor de cabeza se apodero de ella. Pero por primera vez en todo el tiempo que había pasado desde que le conocía vio la desesperación en su rostro al suplicar por la vida de su hermano. Se dio cuenta de que el mayor de los hermanos tenia corazón, uno que sufría por todo lo que estaba pasando y que irremediablemente seguiría tratando de traer a su hermano de vuelta.

La mirada de Bonnie se hablando. Cerro las palmas de las manos deshaciendo aquel hechizo y mirando fijamente a Damon—. Nunca mas Damon. No vuelvas a meterte nunca mas en mi camino —advirtió al mismo tiempo que se dio cuenta de cómo huían sus enemigos. Aun llena de furia se puso en pie, acercándose hacia Elena, allí donde yacía el cuerpo de Jenna. Lo observo sabiendo que ni siquiera tenia una opción. Ya no—. Lo siento… Elena —susurró.

¡El tema grupal está a punto de terminar! Rogamos que los personajes que todavía no hayan intervenido, posteen a continuación con sus últimas reacciones. ¡Muchas gracias a todos por participar!

En un abrir y cerrar de ojos, el caos se había desatado. El cuerpo de Jenna yacía sin vida delante de Elena y de él. Bonnie fue por Klaus y Stefan directamente haciendo uso de sus poderes.  Ojala la joven bruja los hubiera podido consumir hasta las cenizas, pero conociendo la suerte de Klaus era más que obvio que iba a salir ileso de allí, victorioso por su nuevo logro mientras ellos se revolcaban en el dolor y la tristeza de haber perdido a la única persona que de verdad, no estaba involucrada con los asuntos sobrenaturales.

Elena — Mascullo lleno de amargura,  mientras que alargaba sus brazos hasta el cuerpo de la recién fallecida, para tomarla entre ellos y así poder cargarla.  
Con algo de dificultad, por la dolencia tanto física como emocional, se colocó de pie, sin despegar su vista de Jenna.  

Era demasiado difícil ¿Qué se suponía que debía hacer ahora?, Inclino y hundió el rostro por unos instantes entre los cabellos de ella, mientras las lágrimas escurrían entre sus ojos sin parar. Cuando junto un poco de fuerza para hablar, alzo nuevamente su cabeza, para dirigirse a Elena. — Debemos llevarla a otro lugar —No quería desprenderse de la mujer que amaba, no aun. Sin más, comenzó a caminar, esperando que Elena le siguiera.  No tenía ni fuerzas ni energía de hablar con los demás, estaba totalmente destrozado.


Off: Alaric se va con el cuerpo de Jenna

Todo lo que sentía en ese momento se resumía a una palabra: dolor. Podía sentirlo crecer en su pecho y expandirse como una enfermedad a cada parte de su cuerpo. Sus ojos empañados de lágrimas observaban el rostro sin vida de su tía, cuyo cuerpo aun se mantenía cálido. No, no, no, todos sus sueños y aspiraciones habían sido arrebatados de ella sin piedad alguna. Quedaba confirmado para ella que Klaus Mikaelson no poseía corazón alguno. Entonces fue cuando vio a Caroline a su lado, siendo su apoyo emocional en ese momento, más no pudo decir nada cuando la voz del híbrido original buscó llamar su atención pero caso omiso hizo. Contrario a ello, verlo incendiarse causó algo de satisfacción en ella, sabía que no podía morir pero la idea de verlo hecho cenizas afianzó el pensamiento de que haría lo que fuera por acabar con él.

Sus amigos no demoraron en acercarse pero ella no había sido capaz de percibir quién fue primero. Su atención se despegó del cuerpo entre sus brazos cuando escuchó los gritos de dolor de Stefan, quién a ese punto yacía de rodillas en el suelo. Verlo de aquella manera terminó de romper el corazón de la vampiresa, él no la había mirado más allá de una rápida mirada y se había inmutado ante su pena pero seguía amándolo. Por lo que no dudó en hacerle coro a Damon cuando éste suplicó por la vida de su hermano. — Bonnie, no... por favor... — Incapaz de decir más pero en su tono lastimoso y cansado, daba a entender que ya había habido mucha muerte por un solo día.

En un abrir y cerrar de ojos, los dos recién invitados se esfumaron entre los árboles del bosque y entonces fue cuando lo vio, Jeremy estaba a un lado de Anna. — Jer... — Murmura sorprendida. En ese momento no comprendía que se trataba del fantasma de su hermano. Alaric entonces toma a Jenna entre brazos, no sin antes la vampiresa despedirse de su tía. Tiene razón, deben moverla. Se levanta en silencio, limpiando sus lágrimas y se dispone a acercarse primero a su hermano.

El tiempo para el mayor de los Salvatore paso demasiado despacio, suplicando e incluso escuchando en la lejanía la misma suplica por parte de Elena. Los gritos desgarradores seguían atados a su cabeza, hasta que la mirada de Bonnie se cruzo con la suya y temió que el ataque finalmente también fuese dirigido hacia él. ¿Qué le había pasado a la bruja? Eso fue lo que se pregunto antes de sentir como las dos presencias que habían ido allí se desvanecían.

Todo paro, pero no pudo evitar sentir como una vez más la situación claramente demostraba que habían perdido. Quizás si no hubiesen detenido a Bonnie… la voz de la misma inundo su cabeza, en aquello que sin duda parecía ser una amenaza clara y convincente. Desde luego Damon supo que esa magia que tenía en su poder la hacía alguien a tener en cuenta, peor incluso que cualquier bruja que hubiese conocido hasta el momento.

Cuando la morena se retiro para acercarse a Elena, la escena quedo claramente grabada en su cabeza. Vio a Alaric cogiendo el cuerpo de Jenna para sacarlo de allí. Le pareció ver a Jeremy al lado de Annabelle pero no se acerco a ellos. Tenía en mente otra idea. Si Bonnie había conseguido debilitar a Stefan y Klaus lo suficiente para intervenir el quería recuperar a su hermano, y no podía dejarles irse con tanta facilidad.

Ya tendría tiempo más tarde de volver, pero su prioridad en ese momento era tratar de acabar con ese círculo vicioso de amenazas y muertes. Y solamente había un amanera, aun cuando sabían que era nuevamente, un plan demasiado suicida incluso para él, que el mes pasado ya había sido torturado… no pensaba, porque nuevamente estaba furioso y descontrolado.

Aun no era consciente realmente del motivo por el cual había decidido parar, pero lo había echo. Quizás porque había visto la desesperación en el rostro de Damon y pocas veces había visto una imagen como aquella. Quizás porque en el fondo sabia que Stefan seguía siendo el amigo que había estado siempre allí, la persona de la cual Elena estaba enamorada todavía.

Fuera como fuese, se habían marchado y ellos se habían quedado allí, delante de un panorama desgarrador y completamente desastrosos. Cuando Bonnie sabía que tenían que ir al funeral de Jeremy, su corazón se había roto en mil pedazos, pero ver todo aquello solo reforzó sus ansias de seguir obteniendo más poder, uno lo suficientemente letal como para matar a Klaus. Porque la cura ya no era una opción. La cura seria para Elena. Y por eso, ella sabía que tenía que encontrar un poder capaz de matar al hibrido.

Acercándose a Elena, observó a Caroline a su lado, buscando agarrar su mano y al mismo tiempo la de su amiga, que estaba destrozada. Era un gesto de unidad que Bonnie tuvo con ambas, pero donde las palabras carecieron de sentido. Tampoco tenia nada que decir, ¿qué podía decir después de todo? Pedir disculpas no era algo que valiese, eso no traería a Jenna.

Observo como Alaric se ocupaba del cuerpo, como se marchaba de allí… como Elena se dirigía a un Jeremy recién materializado físicamente ante aquella escena. El corazón de Bonnie palpito con fuerza, pero ella bien sabía lo que significaba aquello. Al igual que el resto de personas se quedo expectante, sin saber demasiado bien que hacer. Pero poco a poco todos se fueros dispersando. Ella finalmente también. Necesitaba hacerse más fuerte, más que nunca.

No se había movido del sitio, demasiado afectada por el shock como para hacer algo más que estar al lado de Elena, apoyándola y sirviendo de escudo contra cualquier otro ataque malicioso que pudiera venir tanto de uno como de otro, si el asesinato de Jenna no les parecía suficiente 'castigo'. Pero entre ataques y más ataques superpuestos, lanzamientos y Bonnie poniendo punto y final - Bonnie, que a cada día que pasaba se la veía más segura, más poderosa, y pese a que debería sentirse orgullosa de ella, no dejaba de preocuparla. Damon se interpuso, Stefan y Klaus huyeron en cuanto tuvieron oportunidad, y el daño ya estaba hecho.

Sin moverse del sitio vio cómo Alaric, deshecho, se acercaba al cuerpo sin vida de la mujer que amaba y la recogía con sumo cuidado, y al notar el apretón de su mano vio que Bonnie se había acercado a ellas, y sin mediar palabra podía sentir lo que quería transmitir con ese gesto. No podían arreglarlo, no esta vez; e iba a doler, como lo había hecho antes o puede que más, pero estarían con Elena, siempre.

Después de ese emotivo momento, siguió a Elena con la mirada mientras se acercaba a ... ¿Jeremy? junto a Anna, sorprendida hasta que recordó el asunto ese del velo. ¿Podría estar Jenna atada al mundo de los vivos justo como él lo estaba en ese momento?
— ¿Te quedas con nosotros? — murmuró en la distancia dirigiéndose a Anna. La pregunta iba cargada de significado, pero aún así, la rubia estaba convencida de que su amiga la había entendido. Elena no se separaría de Jer después de esto, ni lo haría Anna - hasta que una fuerza mayor las obligara, de eso estaba segura - y Care se quedaría al lado de su Elena en todo lo que necesitara.

Tal parecía que ese grupo había formado un vínculo, estaban unidos por algo más que dolor y tragedia, y a sus ojos Annabelle había llegado ahí para quedarse.