crónicas vampíricas
ConéctateTe estamos esperando
¿No tienes cuenta? ¡Registrate!
Mayo, 2014
próxima limpieza31/05: personajes y temas
cronicasVampiricas¡Gracias por estos cuatro años!
mystic falls, virginianew orleans, luisiana
apr, 2014temp max 26°C / min 13°C

anuncio 21/04reapertura del foro

anuncio 28/03cuarto aniversario. ¡gracias!


Se encontraron 27 resultados para GINENZO

Página 1 de 2. 1, 2  Siguiente

Gin S. AshkoreSáb Sep 30, 2023 2:48 pm
The eight
Everlastings
—Me dio a entender que los cuerpos seguían intactos.—Aunque, de nuevo, Rayna fue especialmente hermética y ambigua en sus explicaciones.—Lo que sabíamos en la Armería es que estaba vinculada a ellos. Supongo que... si algo les hubiera pasado, lo sabría.—Aunque no le preguntes a Gin: no tiene mucha idea de en qué consisten semejantes conexiones místicas.

«Cuidado Gin, no te confíes.»
«Todavía desconocemos cómo matan un chamán.»

La mirada de extrañeza de Ashkore habla por sí sola. —¿Quién eres tú, y qué has hecho con Lorenzo St. John?—Porque precisamente suele ser él quien tiene las ideas implicadas con asesinatos y matanzas indiscriminadas.—Pero está bien, tienes razón.—Añade, a regañadientes, dejando las bromas a un lado.—En ese caso, tendremos que investigarlo. Preservar nuestra seguridad debe ser prioritario, al margen de cualquier trato.—Y especialmente, la seguridad de Enzo quien, como vampiro, podría terminar a merced de alguien con la fama de Rayna Cruz.

Claro que Gin no permitiría que el conflicto escalara al punto de llegar tan lejos. De ser necesario, mataría a Rayna con sus propias manos si así logra proteger a quien ama.

Suspira. —Si nadie me hubiera dado una oportunidad... No estaríamos aquí.—Juntos. Y Gin se habría privado de conocer la verdadera felicidad.—Darle un voto de confianza es lo mínimo que puedo hacer.—Por lo menos, ante ella, no ha rechazado radicalmente la nueva mentalidad de aquella Armería. Puede que sólo necesite tiempo...

O puede que ni todo el tiempo sea suficiente.

Por desgracia, no podrá tener certeza alguna hasta que quizá sea demasiado tarde. —Yo lo hice... sólo una vez.—Admite, finalmente.—Acababa de llegar a la Armería, y mi tía, Diane, me hizo recorrer las instalaciones. Recuerdo los ataúdes, aunque... reconozco que no les presté demasiada atención.—Porque, a fin de cuentas, no era la reliquia más preciada de la Armería; por entonces, Rayna Cruz y su misión no eran más que una leyenda...

Una leyenda que, como tantas otras, resultó ser cierta.

«¿Y qué haremos con ellos?»

—Supongo que... custodiarlos. O retenerlos.—Añade, sombría.—Ante el peor de los escenarios, serán nuestra única moneda de cambio frente a Rayna Cruz.—Pero, ¿y si el peor de los escenarios sólo está por llegar? La mano de Gin se cierne sobre el arma ante la advertencia del vampiro.—¿Has oído algo?—Sus habilidades podrán concederles una ventaja en caso de que aquella inocente excursión, deje de serlo para toparse con asaltantes no deseados...

—Creo recordar que sí.—Le dice, aunque no tiene muchos detalles de la ocasión en la que visitó aquella ala, pero por lo que sí recuerda de la Armería, todo espacio con armas u objetos que mereciera la pena proteger, disponía de entrada limitada mediante su tecnología.—Pero no debería suponer un problema... Al menos, para nosotros. Nos pedirá mi huella.—Y es que, al fin y al cabo, aquella organización encontró su final con Ginevra Ashkore a la cabeza.

No hay mal que por bien no venga.


28 junio • 18 pm • @Lorenzo St. John
Gin S. AshkoreSáb Sep 30, 2023 2:45 pm
NOW WE'RE STANDING
SIDE BY SIDE
—Todas las páginas, ¿eh?—Inquiere finalmente, sonriendo con picardía.—Obstinado y seguro de ti mismo. Me gusta.—Sólo una de tantas razones por las que fue inevitable que terminase prendada de Enzo St. John.

El vampiro que rompió cada una de sus expectativas, y echó por tierra los valores a los que se aferró durante tantos años de existencia.

—Ten cuidado, Lorenzo St. John.—Le advierte, mientras su voz adquiere un matiz severo dentro de lo jocoso de la conversación.—Yo no lo llamaría incapacidades. Puede que te lleves una sorpresa.—O puede que no lo haga porque, efectivamente, es eso lo que se teme: que por no hacerla sentir humillada, responderá bajo mínimos.—Pero está bien, te tomo la palabra. Cuando te gane en una victoria limpia, haré que te tragues tus palabras.—Y es que, mientras Enzo es el romántico, sin duda alguna ella es la competitiva.

Extremadamente competitiva, añadiría. Un rasgo de su personalidad que, voluntariamente o no, terminó inculcándole su padre, John.

—Tiene que haber algún sitio de fotografía, un photocall o algo así.—Razona acto seguido; aquella ocasión lo amerita.—Aunque no sé si servirá para nosotros. ¿No era verdad eso de que los seres sin alma no tenéis reflejo, ni aparecéis en las fotos?—Por supuesto, sólo está bromeando. En toda su vida, ha conocido a pocas personas con más alma que el propio Enzo.

«...me concederás todo tu tiempo, porque voy a darte tu premio.»

—A ver si lo adivino.—Ashkore entorna la mirada mientras se le escapa una sonrisa con ligereza.—Tendré que ganar si quiero averiguar cuál es mi premio, ¿cierto?—Aunque puede hacerse a la idea, pero aquel pequeño punto de incertidumbre convierte el logro en uno mucho más apasionante. Aquel beso en sus manos sólo puede ser precedido de una manera: Gin acorta distancias para besarlo con cariño, pasión y la emoción de una mujer irrevocablemente enamorada, tomándole de la mano para concluir—: Vamos a buscar ese photocall. No pienso irme del campamento donde me hice con la victoria, sin esa maldita foto.—Aunque el souvenir no sería necesario.

Vaya si recordaría aquel día.

SHIP: #GINENZO
31 agosto • 12 pm • @Lorenzo St. John
Lorenzo St. JohnMar Sep 12, 2023 5:21 pm
The eight
Everlastings
Enzo capta de inmediato que Gin se refiere a las réplicas. La opinión del vampiro es clara: mientras la existencia de los doppelganger no les dé problemas, por él que existan diez Elena Gilbert. Claro, el asunto precisamente es que todo lo que sucede en Mystic Falls y sus alrededores parece estar conectado de alguna manera con ella.

Y eso por sí solo ya es un problema.

—Eso sí es aún más raro.—¿Quedarse donde están? Enzo frunce el entrecejo.—¿Acaso ella ha visto el interior de este lugar? —Pregunta retórica.—No hay suficiente seguridad.—Un edificio en ruinas, el cual puede ser perfectamente asaltado por quién tenga interés y la información correcta.

Como ellos, por ejemplo.

Pero no son asaltantes. Con Gin, está tomando el papel de protector. Y por lo que Enzo puede observar eso espera Rayna Cruz de ellos.—Cuidado Gin, no te confíes. Todavía desconocemos cómo matan un chamán.—Como para creer que será tan fácil deshacerse de uno en caso de que haga falta. De repente, y antes de que Gin pueda sentir ofendida porque Enzo todavía cuestiona su trato con Rayna, se apresura a añadir:—Lo siento, love. No es que no confíe en tus instintos y decisiones. Ella no deja de ser la cazadora de cazadores y yo un vampiro.—Depredador y presa no podrían confiar el uno en el otro, Gin y Enzo saben muy bien de eso, lo suyo fue un proceso arduo. Y ocurrió porque se enamoraron.

No es la primera vez que pasa, ni será la última. Pero sí es inusual.

«Supongo que... no es fácil confiar ante unos valores inculcados tan marcados»

—Te sientes identificada y por eso le das una oportunidad.—No es una pregunta, Enzo lo da por hecho. Pero siempre puede equivocarse también.—No claro que no lo hiciste.—Concuerda, contagiándose con esa sonrisa.—Detrás de todos esas conversaciones venenosas, las indirectas que nos obsequiamos, querías matarme, y yo también.—No podría olvidarlo ni aunque pasaran mil años. Enzo no supo ver las señales hasta que fue demasiado tarde…

Y se dio cuenta que estaba perdido en la maleducada e irritante, pero valiente y pasional Gin Ashkore.

—Bien, de momento, yo confiaré solo en ti. Y me comportaré, lo prometo.—Debe ser franco con ella y elige serlo hasta el final. No le aceptará todo aunque no esté de acuerdo tan solo porque la ama. Sin embargo, estará a su lado, apoyándola cuanto pueda. Mientras dependa de él, Gin jamás volverá a sentirse sola.—No recuerdo haber visto jamás esos cuerpos.—Comenta mientras comienza a caminar junto a Gin, creyendo que quizá ella en algún momento sí lo hizo.

Y probablemente al estar en otras cosas, no le prestó demasiada atención a todos los objetos de la Armería y sus historias.

—¿Y qué haremos con ellos? —Bien, digamos que los encuentran. ¿Y después? Si Rayna Cruz quiere que permanezcan aquí, entonces ¿qué?

Enzo escucha un ruido justo en la zona hacia donde se dirigen. Su expresión se endurece.—Será mejor que te prepares.—Aunque no es necesario ni decirle que coja el arma, Enzo se encuentra con una de las mejores cazadores que conoce, pero naturalmente quiere que no le pase nada, así que mejor ir con arma en mano.—¿Hay alguna puerta de acceso que necesite la huella de alguien? —Eso sí que podría suponer un problema para llegar hasta los cuerpos.

SHIP: #GINENZO

28 junio • 18 pm • @Lorenzo St. John
Lorenzo St. JohnMar Sep 12, 2023 4:14 pm
NOW WE'RE STANDING
SIDE BY SIDE

—No me tientes, Ashkore. Hay mucho más de mí que no has tenido el placer de conocer.—Enzo posee todas las herramientas necesarias —y más— para enamorar a Gin a niveles que ni ella misma es capaz de imaginar ahora mismo, y por supuesto alardea de ello.

Sobre todo porque Gin no sería una conquista más. Se puede leer pura sinceridad en la intensa mirada del inglés, en su sonrisa. Sus sentimientos por la morena son profundos y fuertes. Aquella mujer a quien cuestionó tanto en el pasado, de quien se llegó a burlar por compartir perspectiva con la vieja Armería, y que le llegó a exacerbar por su extremismo y violencia, inesperadamente atrapó su corazón. Ahora, con su valentía y autenticidad dirige cada latido de su corazón.

Lo menos que puede hacer es mantenerla interesada. Ser la clase de hombre que Gin jamás ha tenido a su lado.

—Así que tomar un lugar en tu ocupada agenda.—Enzo finge sentirse ofendido, asiente con la cabeza repetidas veces y frunce los labios.—Está bien. Cuando acabe contigo en esa cita, vas a darme todas las páginas de esa agenda.—¿Una promesa o un reto? A estas alturas ya no lo sabe. Sin embargo, de algo si está seguro: está haciendo un excelente trabajo picando la curiosidad de la cazadora.

Y mientras ambos parecen eternamente envueltos en su idilio —aunque lo creas—, no todos a su alrededor gozan de la misma dicha. Enzo no conoce la historia de Gwen y Aron más que unos pocos detalles por Gin, así que se limita a escuchar y evita hacer algún comentario al respecto.

Aunque no te creas que se mantendrá tan al margen de la familia de su chica. Puede que sea el momento justo para relacionarse con el esposo de su cuñada.

De momento, lo mantiene solo para él. Si algo interesante surge de todo eso ya lo compartirá con Gin.

—¿Trampas de vampiro? —Una pequeña e inusual risa brota de sus labios.—¿Ahora le llaman así las incapacidades de los humanos? —Arquea una ceja. De acuerdo, sabe que se ha ganado un codazo por eso. Aunque Gin no tendría porqué sentirse aludida, la cazadora es capaz de hacer frente a criaturas como él y todavía salir vencedora. Por fortuna, ahora la tiene de su lado.—Creí que eras una mujer de retos, pero ya entiendo lo que sucede aquí. El problema no es que use mis trampas de vampiro, sino lo contrario. Crees que te dejaré ganar.—Eso jamás. O puede que sí, pero depende de exactamente en qué. Claro, ella no tiene por qué saber que Enzo sería capaz de lo que fuese por hacerla sonreír.

—Pero no lo haría. No me gustas tanto.—Acto seguido Enzo se ríe en su cara.—Suena muy bien todo. Espero que haya por ahí una caseta para sacar fotos. ¿No es lo que hacen todos los estadounidenses en sus primeras citas? —Sí, lo hacen. Cursi, pero el inglés amante de la poesía no puede hablar demasiado. Y probablemente, Gin piense igual.

Sus dedos entrelazados con los de su novia, aprietan más el agarre. Es la primera vez que Gin van de su mano entre tanta gente y no puede sentirse más emocionado. Aquella escena les concede una porción de normalidad.

¿Cuánto ha vivido sin esa palabra en su vida?

—Sé que tienes tus propios incentivos para ganar esa carrera, pero yo te daré uno más.—Y dicho esto, Enzo se detiene y se gira hacia ella, sosteniendo sus dos manos con las suyas.—Si ganas esa carrera, mañana en la tarde y noche me concederás todo tu tiempo, porque voy a darte tu premio.— Dedicándole una sonrisa romántica, Enzo lleva las manos de Gin a sus labios y los presiona ligeramente sobre el dorso como todo un caballero inglés.


SHIP: #GINENZO

31 agosto • 12 pm •  @Gin S. Ashkore
Gin S. AshkoreSáb Ago 26, 2023 1:23 pm
The eight
Everlastings
—Sí es enigmática.—Coincide con un asentimiento.—Y, personalmente, empieza a ser inquietante cruzarme con tantas como ella.—Conoce de vista a Elena Gilbert, y se enfrentó personalmente a Katherine Pierce. Además de ellas y de la propia Rayna, ¿habría más réplicas?—Pero, en realidad... No parecía interesada en que se los devolviésemos. De hecho, quiere que se sigan quedando exactamente donde están.—Y eso, según Gin, le concede un voto de confianza.

—Si las leyendas son ciertas... y supongo que lo son —hasta el momento, todo lo que aprendió en la Armería sobre @Rayna Cruz ha dado en el clavo—, con la muerte del octavo chamán, ella también morirá. Supongo que... si incumple su palabra, deshacernos de Rayna Cruz no debería ser complicado.—Atravesar ocho cuerpos inertes, al menos, no debería requerir ninguna complicación, ¿cierto?—Pero... Sabes, admito que la vi dudar.—Le dice entonces, volviendo la mirada hacia Enzo.—Supongo que... no es fácil confiar ante unos valores inculcados tan marcados.—Y la idea, repentinamente, le hace sonreír.—No es que yo confiase demasiado en ti cuando nos conocimos, precisamente.—Más bien, todo lo contrario.

Quién sabe: puede que distraerse un poco durante aquella misión, la ayude a olvidarse de que se encuentran en la Armería.

Tomando una respiración profunda, empuja con fuerza el portón, que apenas ofrece resistencia. A estas horas todavía entra algo de luz por las ventanas; detalle importante, teniendo en cuenta que duda que siga llegando electricidad al edificio. La peor parte habría sido el olor, de no ser porque Sybil se aseguró de devorar hasta la última fibra de carne humana en sus víctimas.

No hay cuerpos en descomposición; sólo huesos.

—En cualquier caso —añade, a modo de conclusión—, parecía dispuesta a dar una oportunidad. No confío en ella, pero...—pero concederle igualmente una oportunidad, es lo menos que puede hacer.

A fin de cuentas, necesitan aliados.

—Si Rayna está en lo cierto... Los cuerpos deben hallarse guardados en una de las salas del ala inferior.—En las profundidades del edificio.

Tendrán que avanzar con mucho cuidado.

SHIP: #GINENZO

28 junio • 18 pm • @Lorenzo St. John
Lorenzo St. JohnMiér Ago 23, 2023 5:50 pm
NOW WE'RE STANDING
SIDE BY SIDE

Lorenzo niega con la cabeza en el acto. Debió haber advertido tal reacción.—No tan rápido, love. No he dicho tal cosa.—Se asegura de mirarla a los ojos.—Solo soy un maldito inglés snob. En resumen: no estoy acostumbrado.—A este tipo de ambientes más informales y alegres para desenvolverse en una cita.—Todavía no lo has captado, eh? lo único que necesito para que esta cita sea perfecta, eres tú.—Y en su rostro deja muy claro que no miente tan solo para hacerla sentir mejor.

Enzo no oculta ni de lejos —ni quiere— su mirada enamorada cada vez que posa sus ojos en ella.

—Igual me toca. Ni creas que soy el tipo de hombre que deja que su chica lo haga todo. Esto es equitativo, Gin Ashkore. Acostúmbrate.—Advierte de una vez sin perder la sonrisa. Y créeme que ya tiene todo planeado en su cabeza: la decoración, la comida, y algo muy importante para Lorenzo…—Poesía. Intentaré enamorarte más con un poco de poesía.—Le da un pequeño adelanto, buscando observar su reacción.

No cree que alguien tuviera ese detalle con Gin  —ni otros tantos que Enzo piensa reservarse para el momento adecuado—, así con eso le dará la bienvenida las facetas escondidas de Lorenzo St. John.

—¿Puedo saber lo que sucede con ellos? —tal vez el letal suegro de Aron y él, se ha metido de algún modo— ¿O mejor encaminamos nuestra atención a donde sea que tengas pensado comenzar ahora? A ver, sorpréndeme. Creo que podría acostumbrarme.—En realidad, podría acostumbrarse a todo lo que tuviera que ver con ella.

Para siempre.


SHIP: #GINENZO

31 agosto • 12 pm •  @Gin S. Ashkore
Lorenzo St. JohnSáb Ago 12, 2023 7:48 pm
NOW WE'RE STANDING
SIDE BY SIDE

—Oh, it’s lovely!—No puede faltar una típica frase inglesa mientras alza ambas cejas ante el panorama que se encuentra enfrente.—No. En definitiva, no sabes lo que estoy pensando.—Bromea, dedicándole una media sonrisa divertida.—Es… inesperado, lo admito.—Leal, creativo y locamente enamorado, Enzo se hubiese valido de otro tipo de escenario para preparar esta primera cita, pero que Gin Ashkore se ofreciera en su lugar, era un impresionante hecho al cuál, el vampiro no pudo negarse.

Y vaya que le ha sorprendido.

Aunque de hecho, no debió haberse sorprendido en absoluto.—Debí haberlo imaginado. Esto tiene tu cara.—Admite, manteniendo la sonrisa.—La cita que nunca hemos tenido, querrás decir —observa de inmediato sin ningún tapujo. Y Enzo no exagera—, fuimos directo de la declaración violenta de amor a compartir habitación, love, saltándonos el romanticismo.—El inglés se lleva una mano al corazón de forma teatral.—Jamás te lo perdonaré.—Entonces ríe. Como siga en ese plan se llevará algo más que un codazo de parte de Gin.

Enzo se muestra interesado en lo relacionado con el proyecto que ambos tienen entre manos…—El romanticismo de la primera cita entremezclado con pasión, acción, misterio y aventura…—De acuerdo, esto es emocionante.—Por supuesto que soy todo tuyo.—Hasta ahí iba todo bien…

Sin embargo, el verdadero motivo de aquella salida, se revela antes de que Enzo se lance de cabeza tras Gin… Aunque, ¿a quién quiere engañar? Igual se lanzará.

—Si no te conociera mejor diría que esto es un intento velado de tener una cita doble.—En verdad le encanta molestarla. Aunque pensándolo bien… Eso sí le ha tomado por sorpresa. Y sí que tiene curiosidad, pero no de interactuar con la cuñada y el concuñado, sino por observar el comportamiento de Gin en ese escenario. Se le antoja interesante.

Respondiendo a esa ternura inusual, Enzo le dedica una expresión de irremediable enamorado antes de tomar su mano con delicadeza, entrelazando sus dedos para seguirle el paso.

Tienen una oportunidad de disfrutar de su propio romanticismo y no permitirá que se eche a perder.


SHIP: #GINENZO

31 agosto • 12 pm • @Gin S. Ashkore
Lorenzo St. JohnLun Ago 07, 2023 4:07 pm
The eight
Everlastings
Antaño, una portentosa —y a veces, intimidante— guarida de los humanos más retorcidos que Enzo ha conocido después de los mismísimos Agustines. Hoy, las ruinas que simbolizan el fracaso del aparente control de la humanidad sobre la especie sobrenatural.

Si hace dos años le hubiesen dicho que esto sucedería, jamás lo habría creído.

Enzo contempla a su alrededor, a pesar de que la calma exterior es habitual en aquel lugar, la verdadera sorpresa se encuentra dentro, sobrepresa para él, claro está. Y, porque desgraciadamente no lo es para Gin, sabe que hizo bien al acompañar a su novia —sí, ese es justamente el título que por fin, Gin ostenta en su vida—, estar a su lado en la confrontación de una pesadilla, una sombra, un fantasma que Gin no menciona con asiduidad, pero que Enzo sabe, sigue ahí.

Algunas veces sigue preguntándose lo que habría pasado si él hubiese estado ahí en ese fatídico día.

Debió haber estado.—No me gusta ella, lo... enigmática.—Menciona el ingés en relación a Rayna Cruz con una mueca de disgusto en los labios.—Y en mi experiencia, cuando quieren algo y no dicen demasiado, es para algo riesgoso y no conveniente. Yo digo que nos los quedemos hasta que ella diga más.—Si Gin hará el trabajo sucio, Rayna debe pagar como debe ser.

Mira a Gin de soslayo, suspirando hondo. Enzo vuelve la mirada al frente, no sin antes tantear con sus dedos la manos ajena, apretando con firmeza después.—Pase lo que pase, no me separaré de ti, love.—Es una advertencia con su semblante endurecido. No quiere escuchar después peticiones de que se marche o se aleje de ella por alguna absurda razón.

Porque sabe como es Gin. Sabe que al más mínimo peligro intentará deshacerse de él para salvarlo. Y qué demonios, Enzo es exactamente igual, pues el muy caradura le empujaría lejos sin darle opción y se dejaría consumir solo en las llamas del infierno.

—La aventura nos espera.—Asiente con la cabeza, soltando la manos de su chica para adentrarse en el lugar.

Enzo no se inmuta ante lo que parece ser un charco de sangre, ya seco sobre el piso. Los sentidos y atención del vampiro estaban puestos sobre cualquier cosa fuera de lugar.


SHIP: #GINENZO

28 junio • 18 pm • @Lorenzo St. John
Gin S. AshkoreLun Jul 17, 2023 4:31 pm


mysterious place
the land of tears


«¿Cuándo todo hubiera terminado...?»
«...Entonces, te sometiste a esto por tu propia voluntad.»

—Enzo...—Se lo pide, sin palabras, contemplándole con intensidad. En su mirada, sería capaz de hallar toda la verdad.—No debía terminar así.—La posibilidad de fracaso existía, pero los Egregoroi confiaban lo suficiente en su sacrificio y en la elección de cada nefilim, como para que la muerte no fuera una opción real.—¿De verdad crees que me habría expuesto a morir ahora?—Ahora, que están juntos. Ahora, que después de todo este tiempo se han reencontrado el uno al otro.

Ahora que por fin, tienen una oportunidad para empezar otra vez. Para ser felices. Y, aunque todavía se siente débil, Gin no puede evitar sonreír con cierto deje de ironía. —No me has dado el beneficio de la duda ni por un instante…—Ahí está: utilizando las mismas palabras que él le dijo la noche en la que se volvieron a ver, hace prácticamente cuatro meses.

No es un reproche, sin embargo.
A veces, sigue sorprendiéndose de hasta qué punto están hechos de la misma pasta.

—¿Me creerías... si te dijera que siempre lo fui?—Le pregunta repentinamente.—Siempre... me lo pregunté. Por qué mi hermana... podía ver la Marca de mi padre.—Sólo una de las dos fue elegida para convertirse en heredera del legado de la Hermandad de cazadores.—Por qué yo no... podía compartir su mismo destino. Pero el mío ya estaba escrito... o eso pensé.—Y si no le doliera todo el cuerpo, se habría echado a reír sin gracia.

Sintió alivio un auténtico confort bajo aquella premisa: Gin nunca pudo ser miembro de la Hermandad, porque fue elegida para ser algo más. Pero, ¿y si fuera cierto, en cualquier caso? Y si tan sólo... no hubiera terminado de encontrar aquel destino. —Te lo explicaré todo.—Le promete.—Mereces saber la verdad.—Intentó dejarle fuera de todo aquello, porque los Augustine todavía sometiéndolo ya eran suficiente carga sobre sus hombros. Ahora sabe que está en el derecho de conocer cada detalle de aquella catastrófica historia...

...Porque así ha sido siempre Gin: centrándose en rescribir un futuro con el que esconder del todo su pasado.

Pero el pasado siempre vuelve, tarde o temprano.

—Llévame... a casa.—Le pide entonces, dejándose ayudar para levantarse.—Creo que... sé lo que tengo que hacer. Y esta vez, voy a hacerlo bien.—Contando con Enzo, desde el principio.

Como siempre debió haber hecho.

Pero no se adentrará en su historia... ni en aquel nuevo proyecto, hasta que pueda descansar un poco más.

SHIP: #GINENZO



14/02
7.30 am
@Lorenzo St. John

Gin S. AshkoreSáb Jun 24, 2023 11:58 am
The eight
Everlastings
Cuando Gin le pidió a Enzo que la acompañara aquella tarde a lo que queda de la Armería, y aunque sí añadió la conveniencia de tener a su novio vampiro cerca —no es demasiado pronto para oficializarlo, ¿cierto?—, se abstuvo de hacer mención a la realidad más evidente: no se habría atrevido a ir sola.

Pero Ashkore es orgullosa por naturaleza, y a pesar de que lo sucedido en aquel lugar todavía pesa sobre ella como una losa, Enzo la conoce bien. No hizo falta que dijera nada para que comprendiera de inmediato la verdad.

O para que asistiera con rotundidad a la propuesta, al menos.

El edificio todavía se alza de forma gloriosa, como la sombra de lo que alguna vez fue, y Gin debe contemplarlo en silencio unos segundos antes de hacer nada más. La Armería, antaño un auténtico hervidero de vida, se ha transformado en un complejo fantasma. Es probable que encuentren más de un par de restos humanos por el camino; muchas de las salas habrán terminado destrozadas o directamente derruidas

Pero aquella que vienen buscando en particular, en principio, y según la misteriosa Rayna Cruz, debería hallarse en perfecto estado. —Fue... críptica en sus explicaciones.—Le dice a Enzo, respondiendo a su muda pregunta.—Pero, si dijo la verdad, los cuerpos de los chamanes aún deben hallarse en el ala más profunda de la Armería.—Una que ni siquiera Gin llegó a visitar en sus años trabajando para ellos.

Suspira profundamente. Trata de inspirar decisión, pero lo cierto es que se siente aterrada. La última vez que estuvo allí, al fin y al cabo, Gin se convirtió en prisionera —de algún modo— de la sirena Sybil. Si los rumores sobre la guerra celestial e infernal son ciertos, aquellas criaturas psíquicas debieron ser devueltas al infierno al que pertenecían.

Pero no tiene del todo claro que no puedan encontrar alguna otra sorpresa. —Entremos.—Le dice finalmente. En cualquier caso, es demasiado tarde para echarse atrás.

SHIP: #GINENZO
28 junio • 18 pm • @Lorenzo St. John
Gin S. AshkoreSáb Jun 24, 2023 11:46 am
WE ARE THE STORM
The warrior replied
«La pregunta ofende, love..»

Lo sé, lo sé. Igual no es el mejor momento para sonreír como una estúpida. Podría ponerte de excusa que igual, se arriesgan a que aquella sea la última vez que puedan disfrutar de nada juntos; aprovechar cada mínima oportunidad sería clave. Sin embargo, no sirve de justificación en el momento en el que ambos —y particularmente, Gin—, han decidido que aquella no será la última vez, en absoluto.

Su futuro no ha hecho más que empezar.

El exterior los recibe como la promesa de un porvenir esperanzador. Reaccionando con rapidez, Gin toma por el brazo a los miembros de una pareja, sonriendo con toda la amabilidad que puede desprender en estos momentos. —Qué hay.—Les saluda.—Disculpad, pero necesitamos vuestra colaboración para un proyecto.—El proyecto de la supervivencia, lo podrían llamar. Las cazadoras de ambos, mundanas y discretas, serían suficientes para pasar desapercibidos el tiempo justo para salir de allí.

Unos segundos entre la muchedumbre, rumbo a la salida del campus, se encargarían de hacer el resto.

Y qué ironía que, en aquellos momentos, con los científicos Augustine pisándoles los talones y en pleno clímax de riesgo, Gin pueda tomar al vampiro de la mano, entrelazar sus dedos con los de él, y sentirse más dichosa y afortunada de lo que se ha sentido en mucho tiempo.

Volviendo brevemente la mirada atrás, creyendo haberlos despistado, le susurra a Enzo, a sabiendas de que su oído sería suficiente para escucharla—: Salgamos de aquí.—Aquel sería el final… del principio.

De aquí, a la eternidad.

Tags:#Ginenzo

01/03 • 20 pm • @Lorenzo St. John
Gin S. AshkoreVie Jun 09, 2023 12:41 pm


mysterious place
the land of tears


Estaba preparada para morir.

Se sabe una egoísta, y previsiblemente, una cobarde por pensar de aquella manera. Pero es cierto: por alguna razón, cuando su vínculo con la entidad celestial quebró, Gin aceptó su destino. Uno que habría vuelto a separarla de su hermana, y sobre todo —prácticamente, como si aquel fuera su único final inevitable—, de Enzo. La incredulidad en la mirada del vampiro, sin embargo, confirma un escenario imposible: no ha muerto. Sigue allí, consciente; su corazón, latiendo.

Y, como si cada pulsación fuera sólo para él, se deja abrazar por aquel cálido beso, tan imperioso y necesario como respirar. La humedad de sus labios; el contacto con su piel, son lo más parecido que recuerda a volver a sentirse viva. —Lo... lo sé.—Gin descansa la frente sobre la del vampiro; no quiere, ni puede, separarse de él. La sensación es difícil de describir, porque lleva varias horas sin conocimiento —técnicamente, muerta—, pero sabe perfectamente lo que ha pasado. O al menos, inconscientemente, lo sabe.—Lo siento.—Se disculpa repentinamente, adquiriendo más conocimiento sobre lo sucedido a medida que se recompone.—Yo... iba a decírtelo. Cuando todo hubiera terminado. El ritual... debía... tenía que...—tenía que haber salido bien. Ashkore confió plenamente en que saldría bien...

...Pero no lo hizo.

Un nuevo fracaso en la cada vez más grande lista de decepciones de Ginevra Ashkore.

Aunque, siendo justos, no todo ha salido mal. —Pero... no lo entiendo.—Tratando de ensamblar todas las piezas, sin éxito, Gin trata de reconstruir los hechos.—Debería estar... en el Otro Lado.—Así es cómo funciona. Así es cómo lo vivió Gwen, hace ya dos años. El sobrenatural que fallece, toca el Ancla al Otro Lado y accede al limbo sobrenatural... porque, como nefilim, Gin murió siendo un sobrenatural...

¿...O tal vez no?

La mirada de Gin se desvía torpemente hacia el anillo que todavía luce en su dedo anular. Antes de marcharse, John le regaló aquel anillo de resurrección que, más por costumbrismo —y por negarse a separarse del todo de su padre—, aún seguía llevando puesto. Un anillo que impide la muerte de los humanos, a mano de sobrenaturales.

Como, por ejemplo: la ruptura entre una humana y su vínculo celestial.

—Soy humana.—No queda del todo claro si lo dice como si lo acabara de recordar, o si sólo está delirando. Pareciera estar siguiendo el hilo de unos pensamientos difíciles de descifrar.—Pero... he estado allí. Sé que he estado allí.—En el Otro Lado. Y allí, ha pasado algo...

...Aunque no es capaz de recordar el qué.

SHIP: #GINENZO



14/02
7.30 am
@Lorenzo St. John

Lorenzo St. JohnLun Mayo 29, 2023 3:37 pm
we are the storm
Marcharse a casa.

Enzo alza apenas las comisuras de los labios en un gesto esperanzador. Ni siquiera ha pensado a donde van a refugiarse, si es que hay un lugar seguro para ello. Lo que sí sabe es que ya está en casa. Donde sea que Gin se encuentre, será su casa y hogar.

Bien, bien. Demasiado poético todo como para exponerlo en voz alta en ese justo momento, así que le toca guardarse su romanticismo para después… Cuando en teoría, se encuentren sanos y salvos. Huyendo, juntos.

«Que no sirva de precedente, pero haz lo que tengas que hacer.»
«O ellos, o nosotros.»


—Me esforzaré para dominarme.—Un firme sentimiento de cabeza y la seguridad de que se limitará a ser sanguinario para salvar sus vidas, es todo lo que Enzo puede ofrecer ahora mismo. Aunque sabe, no siempre será así. Por desgracia, Enzo ha vivido demasiado como para no saber que en el futuro se presentarán más ocasiones en las que deberá usar su bestialidad interior para conseguir sus fines. Así funciona todo en la guerra, y esto que enfrentaban ellos era una de nunca acabar. Quería creer que aquello no serviría de precedente, pero ser iluso no estaba en su sangre.

Cuando tu enemigo es así de poderoso, debes sacar toda la artillería pesada sin importar el qué, sin mirar más que por ti mismo, y los que ames.

—Tomemos la izquierda—Propone, aunque realmente está sobreentendido que esa sería la opción a tomar.—Puede que nos persigan, pero confío en que podamos con mis habilidades podamos tomar ventaja.—Ofrece aquel panorama, sin tomar en cuenta alguna otra opción. Si a cada tanto lleva a Gin en su espalda y avanzan con su velocidad vampírica, podrían despistarlos, podría funcionar. No obstante, Gin parece tener algo mejor en mente.

«¿Confías en mí?»

Frunce el ceño ligeramente sin comprender, pero aún así contesta afirmativamente en el acto:—La pregunta ofende, love.—La seguiría, seguiría a Gin hasta el mismísimo infierno si fuese posible. Sin embargo, también sería capaz de presionarla para que desista de una idea que podría ser la ruina de ambos. Algo le dice que esa ocasión no es la que se presenta ahora mismo.

Enzo atiende a la voz de Gin y se desplaza junto a ella por el camino señalado, llegando hacia el Edificio Whitmore. El vampiro se ve obligado a ralentizar los pasos a un ritmo relativamente normal para no llamar la atención de los estudiantes y demás humanos.

—Hay que mezclarnos.—Deberían hacerse rápidamente con algo de ropa y un vehículo. Raudo, Enzo otea a su alrededor.—Ropa nueva, elige. Lo haré rápido, compulsión y listo. Tan fácil como suena.—Si decidían ahora, podrían mantener su ventaja de los centinelas.—A menos que tú ya tengas otro plan.—Si es más rápido, fácil y más seguro, entonces Lorenzo no tendría problema en seguirlo a cabalidad.



Tags:#Ginenzo

01/03 • 20 pm •  @Gin S. Ashkore
Gin S. AshkoreLun Mayo 01, 2023 12:33 am


mysterious place
the land of tears


En «You are Don Quixote» escribió:—Estoy perdida, madre.
—Dentro de ti, hay mucho más allá de lo que tú conoces. [...] Sé que encontrarás tu camino, hija mía.
—Pero, madre...
—No hay tiempo, cariño. Es la hora de despertar...


No es la primera vez que Gin muere para volver a la vida, y sin embargo, sí es la primera vez que se siente tan intenso, con tantas emociones a flor de piel. El despertar no es progresivo o pausado, ni mucho menos: con el primer latido de su corazón, cada última fibra de su ser despierta en un espasmo violento y cruel. Gin ahoga un grito en su primera bocanada de aliento, abriendo ambos ojos como un resorte y sintiendo cómo le faltan el sentido y la respiración.

Puede que haya tenido que ver con la violenta forma en la que murió: su vida se esfumó sin previo aviso y ahora, de nuevo y sin avisar, ha vuelto al plano de los vivos. O puede que, en realidad, tenga que ver con todo lo que acaba de vivir en el Otro Lado.

Y es que ahí radica precisamente la gran diferencia entre esta ocasión y aquella en la que muriera por primera vez: entonces era una humana sin ventajas, cuya muerte la habría conducido directamente al Más Allá: aquella tierra prometida en la que se dice, las almas puras descansan en paz. Que hubiera regresado entonces fue obra de un arte antinatural: la magia de un brujo de aquellos que se hacen llamar Viajeros. Que lo haya hecho ahora, sin embargo, no se debe a un hechizo en particular... sino a la magia de una de las joyas que aún porta, más por razones nostálgicas o costumbristas, que porque de verdad pensaba que lo podía necesitar.

El anillo de resurrección que le regalase John, su padre.

Aquella joya le ha permitido visitar el Otro Lado brevemente y vivir un encuentro muy especial... claro que, por desgracia, a su regreso es incapaz de recordarlo.

Como tampoco recuerda ahora qué ha pasado, o siquiera quién es... Recuperando el aliento, se percata del sabor metálico sobre sus labios, y del hombre que sostiene su cuerpo, con lágrimas en los ojos. No, no es un hombre. El corazón de la mujer se encoge, conmovido. Es un ángel. Y los ángeles no deberían llorar.

Pero aquel ángel, tiene un nombre. Lo acaba de recordar. —Enzo...—Tiene la voz quebrada; está temblando violentamente. Aún no recuerda bien qué ha ocurrido... y sin embargo, podría quedarse para siempre allí: en los brazos de del vampiro.

¿Así es como se siente el cielo?

SHIP: #GINENZO



14/02
7.30 am
@Lorenzo St. John

Gin S. AshkoreDom Abr 30, 2023 11:22 pm
WE ARE THE STORM
The warrior replied
Oh, por supuesto que los sótanos sobre los que se asienta el edificio Whitmore —aquella red de salas, celdas y pasadizos—, no están hechos para asegurar el escape de absolutamente nadie. Clinton Payne fue inteligente: aprovechó las inversiones de Castle para convertir la humilde morada de la Sociedad Augustine en unas instalaciones dotadas de la más alta tecnología, preparadas para detener cualquier intento de huida de parte de los experimentos con los que con tanto esmero y cuidado, se trabaja en aquel lugar.

Tras las graves intrusiones al Edificio Whitmore, los objetivos quedaron claros: nadie que osara entrar, podría salir.

Sin embargo, la seguridad en la voz de Enzo es tan palpable que, al menos durante aquel breve instante, Gin le cree ciegamente. Ya han tenido demasiada mala suerte para sus próximas quince vidas.

«Somos un equipo.»
Y sonríe.

—Sorteemos todos los obstáculos, entonces —propone, como si aquello fuera cuestión de coser y cantar—, y marchémonos a casa.—Quizá el primer caso para conseguirlo, sea precisamente creérselo. ¿Y adónde marcharán si consiguen finalmente huir? ¿Acaso el hogar de Gin seguirá siendo un lugar seguro? Aquella, y otras preguntas, podrán hallar su respuesta cuando alcancen la superficie, aunque por ahora nada parece demasiado importante.

Aquí y ahora, se tienen el uno al otro. Y Gin... Gin no necesita nada más.

Rueda los ojos. No se puede creer que estén teniendo aquella conversación en medio de una situación como aquella, y sin embargo, es lo más parecido que ambos tienen ahora a una toma a tierra. —Que no sirva de precedente —matiza—, pero haz lo que tengas que hacer.—No es que Ashkore sea precisamente una fan de la violencia gratuita contra humanos, pero tampoco es que vayan a tener otra opción.—O ellos, o nosotros.—Gin conoce lo suficiente a los centinelas y cazadores de parte de Payne, como para ser consciente de que no tendrán contemplaciones, ni se lo pensarán dos veces antes de volarles la cabeza.

Tendrán que ser más rápidos, y probablemente, también más salvajes.

Pero, sobre todo, habrán de mantener la esperanza. Y así, con la promesa de ver juntos un nuevo amanecer en el que poder terminar de decirse todo aquello que aún tienen pendiente, se preparan para marchar rumbo hacia su libertad.

La primera decisión: ¿izquierda o derecha?

La salida hacia la izquierda les llevará directos a los bosques que rodean el campus de Whitmore, siendo el camino que habrían tomado en un primer lugar si hubieran logrado abandonar el edificio sin incidentes. La salida será posible, pero los cazadores podrán seguirlos por varios kilómetros, sin rendirse hasta dar con ellos. De modo que Gin tiene una idea. —¿Confías en mí?—El desvío hacia la derecha sube hasta el Edificio Whitmore, en pleno campus. Una explanada plagada de toda clase de estudiantes y civiles, frente a quienes los Augustine no podrán arriesgarse a llamar la atención.

La jugada puede ser arriesgada, pero maestra. —Por aquí.—A sus espaldas pueden escuchar algunos gritos: ya varios centinelas se han percatado de lo que ha sucedido, y les están siguiendo.

Sólo tendrán una oportunidad.

Tags:#Ginenzo

01/03 • 20 pm • @Lorenzo St. John